martes, 1 de noviembre de 2011

En Paz y Bien


Me ha tocado, en estos últimos meses, la ardua tarea de caminar hacia quien realmente soy. He tenido que decir verdades que antes ocultaba por no herir susceptibilidades, sobretodo de mis seres mas queridos. Escribí en mi Twitter muchas veces: Todo el mundo quiere la verdad. Pero la verdad verdadera es que nadie esta preparado para recibirla.

Opté por tomar decisiones que si bien son dolorosas, son a la final el camino que debe recorrerse para buscar lo que todos queremos en nuestras vidas; la paz interior.

Este camino hacia dentro de uno mismo, se camina solo. Aunque he recibido el apoyo de muchísimas personas, incluyendo el reencuentro con mis padres a quienes extrañaba inmensamente, siempre al final de la noche me quedo solo con mis pensamientos. Muchas veces me he preguntado si hago lo correcto y de ser así, porque demonios duele tanto. Y trato de convencerme con aquello que "el salir de la zona de confort siempre es incomodos"  pero no termino de lograrlo.

La vida es una montaña rusa, sin duda con sus altos y bajos, pero estas vueltas me han dado nauseas. Vivo momentos de euforia y momentos de tristeza y dolor a diario y por hora. Busco los oídos de mis amigos, mantenerme ocupado haciendo mil cosas y al final del día siempre esta la almohada llena de pensamientos.

Es un proceso largo y doloroso, esto de buscarse uno mismo, mas cuando involucras a personas a quien quieres mucho. Pero a la final, no me queda si no irme por la seguridad de una de las pocas cosas que considero verdaderas en este mundo; los sentimientos. Si se siente bien me da paz, entonces camino hacia ello. Si me da tristeza es un sentimiento que me reste, me alejo. Nada fácil, pero necesario.

Días pasan, unos son mas difíciles que otros. Busco explicaciones, consejos y flores de Bach que calmen las ansiedades y las tristezas. Todos tienen un buen consejo, aunque casi siempre insuficiente. Aprecio las buenas intenciones y las agradezco enormemente, a la final toda esa buena energía ayuda muchísimo. Pero siempre falta algo.

Yo sabia que nadar contra la corriente no iba a ser un paseo en el parque. Y aun así, sé que debo seguir por donde voy. Por mi bien y los que me rodean. Estoy cansado de los conflictos, de tener la razón, de ganar las discusiones. Lo que quiero es paz, bienestar, y si eso implica mirar hacia el lado contrario de lo que era antes una vida de lucha por lo que consideraba que se debía luchar, pues así sea.

Estoy cansado, completamente agotado y no quiero seguir así. Con grandes decisiones vienen grandes responsabilidades. Las asumo, por muy dolorosas que sean.

Me han llamado valiente por lo que he hecho. No me siento nada valiente. No hay nada de valiente en esto. No quiero etiquetas, solo quiero ser y tener paz. Refugiarme en unos brazos donde no importe mas nada. Que se detenga el correr del mundo, los prejuicios, las opiniones de todos sobre todo. Yo quiero silencio interno, que se traduzcan en sonrisas externas.

Yo apuesto por que el resultado de todo esto será un cambio para mejor. Espero que allí todo este kilo de estopa que son mis días, valgan al fin la pena. De allí en adelante quiero solo dejarme llevar por el fluir de la vida. En paz y bien.

1 comentario:

  1. Luego de leer este relato, por demás maravillosamente escrito, no me queda más que recordar una frase que me dijeron en una oportunidad "nadie dijo que crecer sería facil", pero si es valiente enfrentarse a los sentimientos, animo guerrero, paz y bien!

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